sábado, 3 de mayo de 2014
Después de una mini-serie de seis números que
definitivamente no pasará a la historia del mundo del cómic, la despiadada
guerra entre los locos de Arkham y los incorregibles de Blackgate ha llegado a
su fin. Sólo queda que el vencedor saboree la dulce victoria y que
disfrute de su efímera recompensa, porque el Caballero Oscuro esta por resurgir
tras los acontecimientos de "Forever Evil", y pretende recuperar lo que le
pertenece. Para que Bane pueda reclamar a Gotham como suya, primero tendrá que
derrotar a su verdadero e indiscutible dueño: Batman. El futuro de la ciudad se resolverá en este duelo de titanes. Como
siempre anticipo, hay spoilers.
Más allá de lo que diga la portada (nunca hay que creerle a
la portada), este no es un duelo entre Hombres Murciélagos; Bane ya se dio elgusto de ser Batman pero ahora ha vuelto a su roll de siempre. Por un lado está
bien, porque lo del Batman-Bane no tuvo ningún fundamente sólido desde el
principio y estaba destinado a no perdurar, pero por el otro lado, hubiera
pagado por presenciar la reacción de Bruce al verlo, y después de todo, una pelea “Batman
vs. Batman” siempre resulta entusiasta aún si está mal planteada. Pero no se
engañen, por lo que a mí respecta fue una buena decisión; así no colaboran con
la bizarreada y dramatización
innecesaria a la cual se dirigían.
Pero antes de narrarnos el inminente combate definitivo, el
número nos pasea por Gotham junto con Bane, que está dispuesto a hacer cumplir
su ley, y su ley dicta cierta orden. Tras ver como unos gamberros militarizados
intentan aprovecharse de la situación por la cual pasa la ciudad, vendiendo
comida y recursos a precios exorbitantes, Bane no duda en partirle la columna a
uno de ellos al mejor estilo “Knightfall”. La ciudad ya tiene energía, el Sol
alumbra el día, él no tiene porque tolerar este tipo de comportamiento y la
gente tampoco; el único que debe tener poder en la ciudad es él. Antes de irse
y de aceptar un tácito agradecimiento por parte del pueblo, Bane les informa
que ellos vuelven a tener el control sobre la ciudad. Los locos se han ido.
Por si esta relación de Bane con el pueblo de Gotham no fuera suficiente como para recordarnos al Bane de “The Dark Knight Rises”, él también sigue portando de manera triunfal ese distintivo abrigo invernal color caqui que tan bien le sentaba a Tom Hardy; de hecho durante esta escena, a excepción de la máscara, todo su atuendo es inspirado en la película y no que le queda para nada mal. Claro que los dibujantes todavía tienen que ponerse de acuerdo y llegar a un consenso con las proporciones que debería tener el grandote, pero eso es harina de otro costal. (Aquí logró levantar al gamberro por la cabeza usando la palma de su mano. Bestial y exagerado.)
Tras esa brutal escena, Bane sigue caminando por las calles y regodeándose de su poderío, hasta que se encuentra con Cobb, hablan del status de su ejército y pactan una reunión con los Talons en la Torre Wayne. Ahora este es un momento particular. Un niño llama a Bane tímidamente para pedirle ayuda, y sorprendentemente Bane acude a su llamado. Bane es un tipo duro, pero nos han dado señales de que parece tener cierta debilidad con los niños. Esto puede deberse a su pasado, en el cual él fue un niño indefenso en la prisión de Santa Prisca, hasta que un día visualizó al hombre en el llegaría a ser, muy diferente a ese cobarde niño, y dedicó todos sus esfuerzos para hacer realidad esa visión.
Bane recuerda que alguna vez él también fue un niño que precisaba ayuda, al igual que aquél muchacho que ahora se la pide para conseguir medicamentos para su madre enferma (vamos, un pequeño Tim). Bane comienza a retirarse sin nada que decirle, pero entonces decide volver y darle un consejo que en su momento le fue fundamental a él: “trágate tus penas y no vuelvas a pedir ayuda”, es decir, válete por ti mismo. Sólo así te harás fuerte. Me pareció una escena interesante, y un pequeño tributo al origen del personaje.
En términos generales el arte es bueno. Eaton siguen manteniendo la línea de "Arkham War", que tampoco era espectacular, pero funcionaba. Pero dejando a un lado las generalidades, el último tercio del cómic se desluce más que el principio, sí, justo en el momento de la pelea. Esto se sebe a esos molestos cambios de entintador que ocurre a veces, y que en este caso resultó claramente desfavorable. Quizá si todo el trabajo hubiera estado a cargo de Scott Hanna, no se hubiera notado tanto lo desprolijo de su labor con respecto al de Jaime Mendoza. Repito, su labor en realidad no fue malo, pero la transición que hubo durante en número lo defenestro. Esas líneas no favorecieron mucho el trabajo de Eaton.
En conclusión fue un one-shot aceptable. No sorprende, no innova, pero tampoco es que de pena leerlo. Todo el número está rodeado por una atmósfera épica engendrada por el regreso de Batman, y el suspenso y misterio hasta el momento de su aparición en escena está bien llevado. El guión y su narrativa es simple y no propone nada nuevo, esos son indiscutibles puntos en contra y son muy pesados. Pero si eso termina por no importarnos (¿y a quién no?), quizá disfrutemos más de la cuenta de este número, y en general, de todo lo que venía sucediendo en "Arkham War". El Caballero Oscuro ha vuelto. ¡Hasta la próxima!
Etiquetas: Bane, Batman, Forever Evil, Forever Evil: Arkham War, Jaime Mendoza, Opinión, Peter Tomasi, Reseña, Scot Eaton, Scott Hanna
2 Batcomentario/s:
No he leído nada de esta saga y no creo que lo haga, por lo que no tuve problema en tragarme algunos spoilers. Solo quería comentar que por los dibujos que acompañan la reseña veo que las garras siguen rondando por gotham. Que fastidio, son unos personajes pedorros que puedes eliminar congelandolos y siempre están. Ya con el arco de los búhos tuve mas que suficiente, no mas garras ni búhos por favor. Lo otro, hace cuanto no se ve una gran historia con bane, que personaje más desaprovechado por Dios, después de la caída no supieron que más hacer con él. Aún sigo esperando el gran cómic de Batman en los new 52, lo último realmente bueno que leí fue espejo oscuro
Se te ha pasado que el niño no le pide "ayuda" a Bane para que su madre se recupere, sino que le pide que la mate para que no sufra y el no se atreve a matarla.
Publicar un comentario