jueves, 2 de octubre de 2014
Crónica
de una vida anunciada
Guión: Scott Snyder
Arte: Greg Capullo
Termina
el largo arco "Zero Year". Nos ha entusiasmado y nos ha fastidiado a lo largo de
casi diez números. Pero hemos seguido la historia hasta el final. Por enésima
vez hemos sido testigos del asesinato de los padres de Bruce Wayne. De su
periplo por el mundo. De su regreso a Gotham. De su inicio como vigilante. De
su establecimiento final como Batman, el Caballero Oscuro, el mejor Detective
del mundo, etcétera ad nauseam.
Hemos
hecho todo el recorrido. Sí, lo hemos hecho a sabiendas de su descenlace.
Conscientes de lo obvio de su conclusión.
¿Alguien
dudó en algún momento de que Batman no sólo sobreviviría al colapso de Gotham,
sino que volvería una vez más a enfrentarse a The Riddler y que lo derrotaría
en su propio terreno?
¿Pudo
alguno de nosotros dudar que burlaría a la muerte, que salvaría a la ciudad,
que asumiría a plenitud su cruzada?
Por
supuesto que no. En el mundo de los cómics de superhéroes sabemos que, por más
oscuros que sean los tiempos, el héroe triunfará. ¡Si hasta la muerte es
conquistable en estos terrenos!
"Zero
Year", más que ninguna otra historia de Batman, no encerraba misterio alguno
para nosotros, porque al ser una historia de iniciación, de regreso a los
orígenes, simplemente nos estaba diciendo como había sido el camino hasta
nuestros días -es decir, el presente en los títulos de Batman-. Pero ahí radica
la trampa, o el gancho si se quiere: independiente de un primer momento -el
asesinato de los padres del niño Wayne- y un último momento -Batman y su lucha
a diario contra el crimen-; lo que nos convoca vez tras vez es ese
"camino", el recorrido que nos lleva del origen primario al fin
último.
Por
ello leemos y releemos el "Year One" de Miller, o el "Earth One" de Johns, o
cualesquiera de los Secret Origins. Porque nos atrae cómo se nos cuenta la
historia. Tanto textual como gráficamente. Y el tándem Snyder/Capullo ha
demostrado más que destreza: nos han brindado talento.
Snyder
ha amarrado una historia usando a The Riddler como su catalizador. Elevándolo
de su sitio algo más simplón e inocuo de otras historias, para transformarlo en
un verdadero terrorista -muy a la usanza de nuestros tiempos- capaz de sitiar a
una ciudad entera en pro de su vendetta personal.
Obviando
los ripios de credibilidad inherentes a actos de naturaleza tan masiva como lo
es el secuestro de una ciudad completa, se agradece que la atención de los fans
sea atraído hacia uno de los villanos clásicos de Batman, que tanto han sufrido
con los ultramediatizados Bane y Joker -y muy en especial este ultimo-.
Quizá
un poco extendido en su relato, Snyder sabe darnos las dosis justas de
información para mantener nuestro interés cuando el relato amenaza con volverse
soso o tedioso.
Sabe
rizar el rizo de las motivaciones de Bruce Wayne para convertirse en Batman,
además de, en base a raccontos, alumbrarnos un poco más sobre el niño Wayne y,
cosa que se ha hecho poco, sobre el adolescente y joven Wayne. Sin olvidar, lo
que demuestra su gran oficio de escritor, que esos flashbacks cumplen la
función principal de explicar las acciones y reacciones del neófito Batman de
"Zero Year".
Greg
Capullo, a su vez, con su acertada representación se transforma a ratos -por no
decir, las más de las veces- en el puntal de un arco argumental que se vuelve
lánguido en algunas páginas. Pero el gran mérito del dibujante, más allá de
esas grandiosas viñetas a página completa o a doble página, está en los
momentos íntimos, cuando su lápiz nos centra en los aspectos emocionales de la
historia, en los personajes mismos, en las expresiones que nos enseñan más de
ellos que sus actos heroicos o desquiciados. Dibujos que potencian diálogos muy
bien escritos.
Porque
la fortaleza de las grandes historias siempre radica en sus pequeñas crónicas,
en sus personajes individuales.
Reitero:
Snyder/Capullo son, a mi entender, el mejor Dúo Dinámico del momento; y "Zero
Year" sale ganando al final.
Nuevamente
nos entregan a Batman. El mismo de siempre, pero distinto. Un héroe cuyas motivaciones
van más allá de la mera venganza o de la rabiosa justicia o de un deseo de
evitar que alguien más sufra lo mismo. Ahora incluimos la culpa. ¡Y cuánto
cambia nuestra concepción de Batman! Miramos con nuevos ojos su cruzada.
Miramos con verdadero dolor la pérdida de Todd. Miramos con comprensión la necesidad
de recuperar a Damian.
Incluso,
uno de los personajes más queridos del universo Batman, emerge bajo una luz distinta. Se trata de Alfred Pennyworth. Ya no es un simple ayudante. Es una
verdadera fuerza detrás del Caballero Oscuro. Su aparición final, no solo confirma
su compromiso con Wayne, sino que nos muestra que es un héroe más (sin olvidar
la emoción que nos provoca el amor casi paternal del viejo mayordomo por su
protegido).
Aunque
nos sobren páginas en el "Zero Year", aunque tengamos que hacer un tour de force
para creernos muchos episodios. Aunque nos hayan contado, en el fondo, la misma
historia de siempre. A pesar de todo ello, saludamos este reinicio de nuestro
héroe favorito. Y agradecemos que Snyder y Capullo, seguidos de Miki y
Plascencia, nos hayan regalado esta historia.
Etiquetas: Alfred Pennyworth, Batman, Batman: Zero Year, Bruce Wayne, Comics, Gordon, Greg Capullo, Reviews, Riddler, Scott Snyder, The Zero Year, Zero Year
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2 Batcomentario/s:
La verdad no estoy de acuerdo.... mala historia, no le encuentro lugar en tiempo, gotham no me cuadra, simplemente no la ubico... no me gusto para nada
Putos nostalfags y su odio al zero year. La etapa fue buena, lenta pero muy buena.
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