Reseña: “Injustice: Gods Among Us - Year Four” #11 y #12

THE ODDS AREN’T ON OUR SIDE

Título: Ultimatums (#11); Throwdown (#12)
Escritor: Brian Buccellato
Lápices: Mike S. Miller
Colores: J. Nanjan

Aunque en la reseña anterior nos quejábamos de que alguien —coff, coff, Buccellato, coff, coff— estaba estirando la acción en demasía, dispuesto, al parecer, a romper el record de los cinco segundos finales de Namekuseí —que duraron, ¿cuánto? Dos semanas o más—, hoy debemos reconocer que, quizá, tanta inmovilidad y melindre eran sólo una toma de impulso para saltar más arriba que el edificio más alto —al estilo del Sups original, hace lejanos 76 años…—.
Porque en estos dos números que reseñamos ahora —o lo que este escribidor, en sus delirios de comentarista al estilo vidrioso de Hunter S. Thompson, llama reseña—, las cosas empiezan a agitarse. Y no sólo a nivel de acción, si no que a nivel de personajes. Es el momento de las decisiones. Y los súper guarros son especialistas en ello —en especial, la jauría de “Injustice”—.
Retomando el cliffhanger del episodio #10, el cómic abre los fuegos con una página de la familia olímpica al completo, repitiendo la exhortación divina de “o te rindes o… te rindes”.
Sip, ahí están Apolo, Heracles, Atlas, Hermes, Atenea y Eros. Qué demonios pinta Eros en todo esto… La verdad es que, dentro de las irregularidades históricas en la presentación de los venerados dioses, la participación de Eros es lo de menos —aunque hubiésemos preferido a su mamacita Afrodita porque a ella sí que no pueden dibujarla con ropa… Sería algo cercano a la blasfemia—.
As we said before, casi todo el panteón nos saluda en la entrada para ser testigos de cómo el cabeza dura Sups vuelve a negarse —seguramente cree que Rao es más poderoso que estos dioses terrestres—.


Pero Sups no es tonto. De hecho ese es el gran error que se comete con todos los dictadores: creer que son tontos. Por acá pagamos bien caro esa equivocación… y la seguimos pagando —¡maldito y cobarde pacto de silencio entre los militares!—.
El Hijo de Krypton tiene su carta bajo la manga. ¿Qué se creían? ¿Qué sólo Batsy tenía un plan para todo? Dateado por Cyborg, con toda seguridad, Supermusculín debe haber previsto que sus acciones iban a cabrear a más de alguna familia divina, en especial a la griega, dada desde siempre a las peleas y el intervencionismo —como cierto país del norte—. Dioses nórdicos no podían ser porque se la pasan borrachos en cerveza. Egipcios tampoco, que parecerían Backyardigans con tanta cabeza de animal. Alá menos, que ya tiene mucho que hacer en contra de los infieles de occidente. Y el Dios cristiano… bueno, de ése sabemos que está haciendo la vista gorda hasta que un día nos traiga el Armagedón de una.
¡Tenían que ser los griegos!
Así que Sups, entre la espada y la pared, recurre al plan B: llamar a los otros miembros de la Justice League —es decir, los que aún le eran leales—. Claro que uno de ellos es Raven, perdida en alguna dimensión, dándose con una piedra en el pecho por haber aniquilado a su papaíto Trigonfinal del tercer año de “Injustice”, ¿recuerdan?—; y el otro, Captain Marvel… bueno, tras ser raptado del colegio por Harley Quinn, permanece inconsciente en la forma de Billy Batson, encerrado en la Arrowcave —y luego hay alguno que protesta porque le decimos Green Batman a Oliver Queen…—; ¿y el tercero? El tercero es Luthor y eso nos debería ahorrar todas las explicaciones a estas alturas del Universo DC. Aunque aquí nos sirve para husmear un poco más en su proyecto de ciencias… Sí, ese clon dentro del tubo de ensayo…
¿Cambiará esto la situación?


La verdad es que palabras sacan palabras y las órdenes del Todopoderoso, el Amontonador de nubes, el Tonante, el Crónida Zeus no son cuestionables y cuando WW se atreve a desafiarlas, sólo significa una cosa: ¡a la pelea! Cosa que los chicos de “Injustice” adoran, aunque… ooohhqué pena, Batsy y sus amigos se tienen que hacer a un lado. Atlas se los dice al modo más diplomático. Estilo Yahvémía es la venganza y la retribución” (Deuteronomio 32:35). O dicho en términos más mundanos, “no se metan en pelea de grandes, mocosos”.
Pelea que Sups y sus amigos empiezan a perder fácilmente —¿qué se creían? Son dioses—, a vista y paciencia de Batsy y sus chicas, que parecen disfrutar bastante con la masacre —¡y nosotros también!—.


Pero como Buccellato sabe lo que hace, nos deja a WW con un terrible dolor de garganta, a Jordan con su armadura esparcida como Lego —¿alguien notó el parecido entre la armadura que construye el Yellow Lantern con la de BatGordon? Sospechoso…— y a Sups girando como satélite, para hacernos volver a Batson y ver un poco más de lo que Ares se trae entre manos…
Sí, Buccelato se reivindica con estos dos capítulos, unido al efectivo dibujo de Miller —aunque sus proporciones algo desproporcionadas nos molesten en más de una viñeta—.


“Injustice” no está muerta aún. Podemos estar seguros de que nos queda mucha tela por cortar —tanta como la que los dibujantes insisten en ponerles a los dioses griegos, grrrr…—. Veremos que nos aporta la aparición en escena de Captain Marvel. Veremos cuál es la agenda secreta de Ares —aunque mis apuestas van por el lado “derrocar a papito”—. Veremos si Batman va camino de transformarse en secundario como paso el año pasado. Y veremos… veremos por qué colocan el plural de ultimátum con una S final, si es una palabra latina cuyo plural es curricula.

Todo eso veremos…

Comentarios

Anónimo ha dicho que…
Este es el ultimo comic de injustice? ya que el juego que es la base con la que hicieron este comic virtual se realizo en "year five" y estamos en el cuatro asi que asumo que los eventos que vengan desencadenaran los eventos del video juego, o posiblemente veamos una version comic del juego y luego un year sex?