#WhoWatchesDCComics: Las ocho peores tragedias ocurridas en Ciudad Gótica durante Los New 52 y DCYou
La era de The New 52 ha terminado para dar paso a una nueva etapa de “renacimiento” en el Universo DC, pero antes de despedirnos definitivamente de este sello editorial (mas no de su continuidad) en El Blog de Batman hemos decidido traerles lo que, para nosotros, fueron los puntos más destacables del universo post-“Flashpoint”. Esta vez, haremos foco en la ciudad de Gotham y en sus más grandes catástrofes sufridas a lo largo de los años, porque si hay algo que no le podemos negar a la continuidad de Los Nuevos 52 es esa constante tendencia a tirar la casa por la ventana en cada una de sus historias, siendo la desdichada Gótica, junto a sus respectivos habitantes, la menos beneficiada en este asunto. Con motivo de recordar las muchas peripecias por las que ha tenido que pasar nuestro Encapotado para defender su querida ciudad, es que hoy les traemos las más grandes catástrofes ocurridas a Gotham durante la etapa The New 52/DCYou. ¡Disfruten de la desgracia ajena!
Tener a un Man-Bat surcando los cielos ya es suficientemente malo, pero tener un brote contagioso esparciéndose de forma incontrolable por las calles y transformando a la gente en estos monstruos alados, es simplemente algo de otras proporciones que puede propiciar una catástrofe. Eso fue precisamente a lo que Batman tuvo se enfrentó en “Detective Comics” #19, en una historia conocida como “The 900”, título que no solo hace referencia al bloque residencial en donde se originó el brote, sino que además es una alusión a la numeración que hubiera tenido dicha entrega de no haber optado por reiniciarse tras The New 52. No obstante, si ocupa el primer escalafón en este top de catástrofes es porque el susodicho brote no terminó siendo más que un susto y la situación no pasó a mayores. Gracias al sacrificio del doctor Kirk Langstrom, que se sentía culpable de la epidemia, se logró controlar el patógeno y revertir la condición de los infectados. En el proceso, Langstrom adoptó la forma de Man-Bat definitiva y desapareció en medio de la noche. Sin embargo esto no quita que, durante un corto período de tiempo, horrendas bestias aladas hayan sembrado el terror tanto en el cielo como en las calles de Gotham.
Resulta difícil catalogar los eventos de “Robin War” dentro de un espectro de fatalidades, por un lado porque sus protagonistas rebozan de energía y jovialidad, rechazando así casi todo el sentido trágico que conlleva la presencia de Batman (ahora ausente), pero además, a pesar de prometer mucho, muchísimo, “Robin War” no dejó su marca permanente ni en Gotham ni en los lectores. Pero sí hizo bullicio, y esa es la razón por la cual está en este Top. Tras un asesinato que involucró a uno de los miembros del movimiento “We are Robin”, la ciudad pasó por un tenso estado socio-político con la implementación de la “ley anti-Robins” por parte de la concejal Noctua, aliada de la Corte de los Búhos. Gracias a esta ley, decenas de adolescentes fueron puestos bajo arresto por el solo hecho de llevar una máscara, portar una “R” o simplemente por vestir los colores emblemáticos del petirrojo: rojo, amarillo y verde. Como es de imaginar, estando los Búhos detrás de esto, los apresados tampoco tuvieron el mejor trato judicial y fueron literalmente encerrados en jaulas. Todo un escándalo civil que el propio Jim Gordon presenció y se encontró impotente al no poder hacer nada al respecto ya que la ley es la ley, y él formaba parte de ella. Por último, el arco finalizó con una Corte decidida a reducir la ciudad a cenizas liberando a una tropa de Talons de élite, los mejores asesinos que la Corte podía proveer… y que terminaron cayendo ante un puñado de Robins, es decir, jóvenes entusiastas que realmente no deberían haber tenido la más mínima oportunidad. Gotham respira una vez más aliviada, y nosotros nos quedamos con la sensación de algo que pudo ser, pero que no fue. Aún así, aquí tiene su lugar en esta lista.
El arco argumental “Gothtopia” fue lo último que el guionista John Layman nos dejó en su remarcable paso por “Detective Comics”, y aunque se la pueda tildar de pretenciosa al momento de incluir en el evento a cuatro series más ("Bartgirl", "Birds of Prey", "Catwoman" y "Batwing"), dando como resultado algo que podría definirse como un crossover de segunda categoría, lo cierto es que “Gothtopia” resulta sumamente eficiente si se omite su absurda ambición, y se limita su lectura únicamente a los tres números principales de la serie. Sin embargo, lo que nos atañe no es la calidad de la historia, sino como Gotham se involucra en ella y que consecuencias conlleva. En “Gothtopia” la ciudad entera se ve sumida en una realidad ilusoria y casi utópica. Gotham nunca lució mejor, el Sol jamás había concedido tan espléndidos rayos de luz como los que ahora bañaban las impecables y lustrosas calles. Pero todo esto era superficial en comparación con las cosas que en verdad importaban: el crimen era bajísimo, el desempleo mínimo y la economía estable. Todo parecía marchar más que bien para la nueva ciudad del mañana que, bajo una capa de ingenua fantasía, seguía siendo la grasienta, oscura y mugrosa ciudad de siempre.
De más está decir que Batman, con la ayuda de Ivy, consigue librarse de esta ilusión causada por Scarecrow en su búsqueda por maximizar la potencia de su gas del miedo, y finalmente consigue detenerlo justo antes de que expanda su gas por todo el estado. La ciudad no tarda en volver a la normalidad, pero durante la semana que estuvo presa de aquella toxina de falso conformismo y felicidad, Bruce alcanzó a registrar más de tres docenas de suicidios que en aquél momento le resultaron inexplicables, pero luego dedujo que fueron inducidos por los horrendos experimentos que el Dr. Crane y su gente realizaban –por la noche y de manera furtiva– a distintos ciudadanos. Durante un breve pero intenso período de tiempo, la desesperanza y el desasosiego reinaron en Gotham casi imperceptiblemente.
“La Noche de los Búhos” fue el primer gran crossover Batmaníaco de la nueva continuidad, que involucró a cada miembro de la Batfamily (incluyendo a las Birds of Prey) para defender la ciudad de un mal mayor: La Corte de los Búhos. La lucha por el dominio de Gotham jamás se sintió tan personal en la vida del Encapotado, sintiendo como aquello que creía suyo era en realidad custodiado por alguien más desde las sombras. Una amenaza latente, primigenia, que esperó el momento idóneo para salir a la superficie. En aquella fatídica noche en que los Talons finalmente despertaron del sueño de la muerte, Batman y compañía se encontraron desbordados y ampliamente superados en número, pudiendo evitar varios de los asesinatos políticos planeados por La Corte, pero no todos, y es así como gran parte de las personas más importantes de Gotham fallecieron ante la inexorable eficacia de estos asesinos. Más allá de las muertes en sí, la gran verdadera tragedia no solo para la ciudad, sino también para Bruce, es el hecho de que el enemigo haya decidido abandonar la oscuridad y dar la cara. Ahora los habitantes de Gotham saben que nunca están solos, La Corte los vigila.
Un fatal choque de trenes, el arresto a Jim Gordon, el regreso de Carmine Falcone, el desplome del Asilo Arkham, Gotham ardiendo a manos de Firefly, y un sinfín más de calamidades que tienen lugar a lo largo de los cincuenta y dos números y que he decidido omitir, fueron los que permitieron a “Batman Eternal” escalar hasta esta posición del top. En retrospectiva, cuesta pensar en momentos tan caóticos como éste para Gotham, para el Encapotado y para el propio argumento. Y es que “Eternal” no quiso privarse de nada a la hora de seleccionar su repertorio de villanos consiguiendo que desfilen por sus páginas casi toda la galería, desde los más notorios hasta algunos completamente olvidados. Snyder y Tynion se esforzaron por ofrecernos un cóctel dinamitado de misterio y acción Batmaníaca. En el medio, la ciudad sufrió los inevitables estragos de tan volátil historia. Dicho esto, nada perduró y la única consecuencia realmente palpable tras la finalización de la serie fue la destrucción del Asilo Arkham, pero se debió exclusivamente a la pretensión de DC de lanzar una mini-serie que tendría al traslado del asilo como eje de todo. Como suele pasar (más si sos DC), no todo ocurre como uno quiere y “Arkham Manor”, que narraba los hechos de cómo la mansión Wayne se convertía en el nuevo asilo, no pasó de las seis entregas.
El juego final, la última carta en la azarosa baraja del Príncipe Payaso para humillar y ultimadamente vencer a su eterno rival. En definitiva, “Endgame” representa el máximo esfuerzo –hecho hasta el momento– del Joker para derrotar a Batman. Tras su incierto destino luego de caer por el abismo en “Death of the Familily”, el odio y resentimiento del Payaso llega a límites insospechados, desechando toda clase de piedad que pueda surgir por Gotham y sus habitantes. Es así como la ciudad sumó un nuevo hito en cuanto a tragedias y momentos oscuros se refiere, la noche en el que el Joker finalmente concretó su plan más elaborado e infectó a toda la ciudad con una toxina especial que no provocaba la muerte, sino que incitaba a un completo estado de locura. Con sus extasiados ciudadanos dejándose llevar por un histriónico estado de violencia, Gótica se convirtió en un escenario post-apocalíptico en cuestión de horas. El GCPD, incapaz de contener la propagación del virus, se encontró sobrepasado por la situación y, más pronto que tarde, desistieron de actuar, depositando todas las esperanzas en el único que podía hacer algo al respecto: Batman. Sí, una vez más hizo falta la colaboración de toda la Batfamily para salir de este embrollo y, en última instancia, cuando era obvio que se estaba jugando el destino definitivo de Gotham, hasta los más estrictos villanos como lo son Bane, el Pingüino, Scarecrow o Freeze se dignaron a ayudar al Murciélago. La broma alcanzó su clímax cuando, haciendo uso de trofeos robados por él mismo de la Batcave, el Joker realizó un demencial desfile por la calle, como burla suprema hacia el Hombre Murciélago y su querida Gotham. Aquella vez en que Batman volvió a salvar a la ciudad de aquellas pálidas manos asesinas, perduraría por siempre en el recuerdo de los gothamitas, sobre todo por el sacrificio final.
Una vez más, llegado a este punto vale la pena recordar la intención del Top. “Forever Evil” fue un decepcionante e innecesariamente intricado arco argumental que dejó al mundo huérfano de sus mayores superhéroes, a la vez que el Sindicato del Crimen se hacía con el poder absoluto y sumía a las principales ciudades, incluyendo a Gotham, en una oscuridad eterna tapando al mismísimo Sol. De nuevo, “Forever Evil” no es de las mejores historias, pero no es por su calidad argumental por lo que está aquí, sino por las consecuencias destructivas que ésta tuvo en Gotham. Sin su principal protector, y con el mundo hecho un caos, la ciudad quedó a la suerte de Dios o mejor dicho, y peor aún, de los principales villanos, que controlaban diferentes porciones de Gótica en nombre del Sindicato. Freeze, Ivy, la Ventrílocua, el Pingüino, todos tenían y administraban un área, pero también sembraban destrucción en los alrededores. El esquema de la ciudad rápidamente pasó a ser reconocible por las diferentes zonas de dominio, y ninguna era agradable. Es difícil estimar los daños que este evento ocasionó porque, como siempre, tras su finalización todo volvió a su lugar, junto con la sensación de “acá no pasó nada”. Pero es ineludible el hecho de que, durante este tiempo de completa oscuridad, que no fue necesariamente corto, la ciudad fue pura tinieblas y le perteneció única y exclusivamente a la peor escoria de Gotham. El único precedente de algo así es quizás “No Man's Land”, evento anterior a la continuidad actual.
Y aquí estamos. Fue un largo camino, desde un brote de Man-Bats hasta una alucinación colectiva, desde la noche en que los Búhos salieron de las tinieblas hasta el día en el que el Joker perdió la paciencia, hemos visto a la pobre Gotham asediada por amenazas de todo tipo. Sin embargo, aún falta la tragedia primigenia, aquella hecatombe que dio inicio a todo en más de un sentido y que fue tan potente y funesta, que el tiempo impuso que dicho suceso sea recordado como “El Año Cero”, el año en el que Gotham tuvo que caer para volver a surgir. Es como si cada villano necesitara al menos una oportunidad para desquitarse con la ciudad. Scarecrow casi ve sus sueños cumplidos en “Gothtopia”, el Príncipe Payaso desfiló con un carnaval de locura y destrucción por las calles, y en “Forever Evil” cada villano tuvo su pequeña porción de Gótica para usar de punching bag pero, y cuesta creerlo, el codiciado puesto de principal destructor, causante de la mayor tragedia de Gotham dentro de la nueva continuidad se lo lleva Edward Nigma, a.k.a. The Riddler.
Bruce apenas comenzaba a forjar la leyenda de Batman cuando el enemigo más letal hasta entonces mostró la cara: la ignorancia, y su verdugo era Riddler. Bajo la premisa de “evoluciona o muere”, un desquiciado Nigma desafió a los ciudadanos de Gotham a alcanzar un nuevo estado intelectual que le permitiera resolver sus acertijos, y así dejar atrás la mediocridad e ignorancias que, según él, estaban destruyendo la ciudad. Ante el inminente fracaso por parte de los civiles y la consecuente victoria de Riddler, éste castigó a Gotham con una nueva época oscura al dejarla sin electricidad. Más tarde, ante un segundo fracaso, vino lo peor. Edward inundó las calles con aguas contaminadas con una sustancia de crecimiento vegetal acelerado, propiedad de la doctora Isley (Ivy). La ciudad entera quedó bañada en un tinte verde compuesto principalmente de maleza y trepadoras. Gotham retornó a la prehistoria y se volvió salvaje. Debido al bloqueo de los puentes y accesos, la ciudad perdió casi toda comunicación con el exterior, y la entrada y salida a la misma era prácticamente imposible, además de las múltiples amenazas globales en caso de que alguien intentara escapar. Según Alfred, al menos un nueve por ciento de la ciudad se perdió por completo, con daños irreparables tras la inundación. Tan solo un mes después de la catástrofe, y con la ayuda de Wayne Enterprises, Gotham volvió a brillar con un resplandor nuevo, ya que su remodelación tuvo que iniciarse casi de cero. De las cenizas resurgió una nueva ciudad, pero para ello primero tuvo que haber fuego, y eso fue “Zero Year”, la más grande tragedia que enfrentó Gotham en esta continuidad.
¡Eso es todo, amigas y amigos! Luego de “Zero Year” no es de extrañar que los habitantes de Gotham se tomen a la ligera los demás sucesos. Me gustaría leer sus opiniones y sugerencias arriba, en la caja de comentarios, o en Facebook. ¿Qué les pareció el Top? ¿Están de acuerdo con el orden? ¿Hay algún evento el cual haya omitido? Siéntanse libres de comentarlo. ¡Hasta la próxima!
8 - “THE 900”.
Tener a un Man-Bat surcando los cielos ya es suficientemente malo, pero tener un brote contagioso esparciéndose de forma incontrolable por las calles y transformando a la gente en estos monstruos alados, es simplemente algo de otras proporciones que puede propiciar una catástrofe. Eso fue precisamente a lo que Batman tuvo se enfrentó en “Detective Comics” #19, en una historia conocida como “The 900”, título que no solo hace referencia al bloque residencial en donde se originó el brote, sino que además es una alusión a la numeración que hubiera tenido dicha entrega de no haber optado por reiniciarse tras The New 52. No obstante, si ocupa el primer escalafón en este top de catástrofes es porque el susodicho brote no terminó siendo más que un susto y la situación no pasó a mayores. Gracias al sacrificio del doctor Kirk Langstrom, que se sentía culpable de la epidemia, se logró controlar el patógeno y revertir la condición de los infectados. En el proceso, Langstrom adoptó la forma de Man-Bat definitiva y desapareció en medio de la noche. Sin embargo esto no quita que, durante un corto período de tiempo, horrendas bestias aladas hayan sembrado el terror tanto en el cielo como en las calles de Gotham.
7 - “ROBIN WAR”.
Resulta difícil catalogar los eventos de “Robin War” dentro de un espectro de fatalidades, por un lado porque sus protagonistas rebozan de energía y jovialidad, rechazando así casi todo el sentido trágico que conlleva la presencia de Batman (ahora ausente), pero además, a pesar de prometer mucho, muchísimo, “Robin War” no dejó su marca permanente ni en Gotham ni en los lectores. Pero sí hizo bullicio, y esa es la razón por la cual está en este Top. Tras un asesinato que involucró a uno de los miembros del movimiento “We are Robin”, la ciudad pasó por un tenso estado socio-político con la implementación de la “ley anti-Robins” por parte de la concejal Noctua, aliada de la Corte de los Búhos. Gracias a esta ley, decenas de adolescentes fueron puestos bajo arresto por el solo hecho de llevar una máscara, portar una “R” o simplemente por vestir los colores emblemáticos del petirrojo: rojo, amarillo y verde. Como es de imaginar, estando los Búhos detrás de esto, los apresados tampoco tuvieron el mejor trato judicial y fueron literalmente encerrados en jaulas. Todo un escándalo civil que el propio Jim Gordon presenció y se encontró impotente al no poder hacer nada al respecto ya que la ley es la ley, y él formaba parte de ella. Por último, el arco finalizó con una Corte decidida a reducir la ciudad a cenizas liberando a una tropa de Talons de élite, los mejores asesinos que la Corte podía proveer… y que terminaron cayendo ante un puñado de Robins, es decir, jóvenes entusiastas que realmente no deberían haber tenido la más mínima oportunidad. Gotham respira una vez más aliviada, y nosotros nos quedamos con la sensación de algo que pudo ser, pero que no fue. Aún así, aquí tiene su lugar en esta lista.
6 - “GOTHTOPIA”.
De más está decir que Batman, con la ayuda de Ivy, consigue librarse de esta ilusión causada por Scarecrow en su búsqueda por maximizar la potencia de su gas del miedo, y finalmente consigue detenerlo justo antes de que expanda su gas por todo el estado. La ciudad no tarda en volver a la normalidad, pero durante la semana que estuvo presa de aquella toxina de falso conformismo y felicidad, Bruce alcanzó a registrar más de tres docenas de suicidios que en aquél momento le resultaron inexplicables, pero luego dedujo que fueron inducidos por los horrendos experimentos que el Dr. Crane y su gente realizaban –por la noche y de manera furtiva– a distintos ciudadanos. Durante un breve pero intenso período de tiempo, la desesperanza y el desasosiego reinaron en Gotham casi imperceptiblemente.
5 - “LA NOCHE DE LOS BÚHOS”.
“La Noche de los Búhos” fue el primer gran crossover Batmaníaco de la nueva continuidad, que involucró a cada miembro de la Batfamily (incluyendo a las Birds of Prey) para defender la ciudad de un mal mayor: La Corte de los Búhos. La lucha por el dominio de Gotham jamás se sintió tan personal en la vida del Encapotado, sintiendo como aquello que creía suyo era en realidad custodiado por alguien más desde las sombras. Una amenaza latente, primigenia, que esperó el momento idóneo para salir a la superficie. En aquella fatídica noche en que los Talons finalmente despertaron del sueño de la muerte, Batman y compañía se encontraron desbordados y ampliamente superados en número, pudiendo evitar varios de los asesinatos políticos planeados por La Corte, pero no todos, y es así como gran parte de las personas más importantes de Gotham fallecieron ante la inexorable eficacia de estos asesinos. Más allá de las muertes en sí, la gran verdadera tragedia no solo para la ciudad, sino también para Bruce, es el hecho de que el enemigo haya decidido abandonar la oscuridad y dar la cara. Ahora los habitantes de Gotham saben que nunca están solos, La Corte los vigila.
4 - “BATMAN ETERNAL”.
Un fatal choque de trenes, el arresto a Jim Gordon, el regreso de Carmine Falcone, el desplome del Asilo Arkham, Gotham ardiendo a manos de Firefly, y un sinfín más de calamidades que tienen lugar a lo largo de los cincuenta y dos números y que he decidido omitir, fueron los que permitieron a “Batman Eternal” escalar hasta esta posición del top. En retrospectiva, cuesta pensar en momentos tan caóticos como éste para Gotham, para el Encapotado y para el propio argumento. Y es que “Eternal” no quiso privarse de nada a la hora de seleccionar su repertorio de villanos consiguiendo que desfilen por sus páginas casi toda la galería, desde los más notorios hasta algunos completamente olvidados. Snyder y Tynion se esforzaron por ofrecernos un cóctel dinamitado de misterio y acción Batmaníaca. En el medio, la ciudad sufrió los inevitables estragos de tan volátil historia. Dicho esto, nada perduró y la única consecuencia realmente palpable tras la finalización de la serie fue la destrucción del Asilo Arkham, pero se debió exclusivamente a la pretensión de DC de lanzar una mini-serie que tendría al traslado del asilo como eje de todo. Como suele pasar (más si sos DC), no todo ocurre como uno quiere y “Arkham Manor”, que narraba los hechos de cómo la mansión Wayne se convertía en el nuevo asilo, no pasó de las seis entregas.
3 - “ENDGAME”.
El juego final, la última carta en la azarosa baraja del Príncipe Payaso para humillar y ultimadamente vencer a su eterno rival. En definitiva, “Endgame” representa el máximo esfuerzo –hecho hasta el momento– del Joker para derrotar a Batman. Tras su incierto destino luego de caer por el abismo en “Death of the Familily”, el odio y resentimiento del Payaso llega a límites insospechados, desechando toda clase de piedad que pueda surgir por Gotham y sus habitantes. Es así como la ciudad sumó un nuevo hito en cuanto a tragedias y momentos oscuros se refiere, la noche en el que el Joker finalmente concretó su plan más elaborado e infectó a toda la ciudad con una toxina especial que no provocaba la muerte, sino que incitaba a un completo estado de locura. Con sus extasiados ciudadanos dejándose llevar por un histriónico estado de violencia, Gótica se convirtió en un escenario post-apocalíptico en cuestión de horas. El GCPD, incapaz de contener la propagación del virus, se encontró sobrepasado por la situación y, más pronto que tarde, desistieron de actuar, depositando todas las esperanzas en el único que podía hacer algo al respecto: Batman. Sí, una vez más hizo falta la colaboración de toda la Batfamily para salir de este embrollo y, en última instancia, cuando era obvio que se estaba jugando el destino definitivo de Gotham, hasta los más estrictos villanos como lo son Bane, el Pingüino, Scarecrow o Freeze se dignaron a ayudar al Murciélago. La broma alcanzó su clímax cuando, haciendo uso de trofeos robados por él mismo de la Batcave, el Joker realizó un demencial desfile por la calle, como burla suprema hacia el Hombre Murciélago y su querida Gotham. Aquella vez en que Batman volvió a salvar a la ciudad de aquellas pálidas manos asesinas, perduraría por siempre en el recuerdo de los gothamitas, sobre todo por el sacrificio final.
2 - “FOREVER EVIL”.
Una vez más, llegado a este punto vale la pena recordar la intención del Top. “Forever Evil” fue un decepcionante e innecesariamente intricado arco argumental que dejó al mundo huérfano de sus mayores superhéroes, a la vez que el Sindicato del Crimen se hacía con el poder absoluto y sumía a las principales ciudades, incluyendo a Gotham, en una oscuridad eterna tapando al mismísimo Sol. De nuevo, “Forever Evil” no es de las mejores historias, pero no es por su calidad argumental por lo que está aquí, sino por las consecuencias destructivas que ésta tuvo en Gotham. Sin su principal protector, y con el mundo hecho un caos, la ciudad quedó a la suerte de Dios o mejor dicho, y peor aún, de los principales villanos, que controlaban diferentes porciones de Gótica en nombre del Sindicato. Freeze, Ivy, la Ventrílocua, el Pingüino, todos tenían y administraban un área, pero también sembraban destrucción en los alrededores. El esquema de la ciudad rápidamente pasó a ser reconocible por las diferentes zonas de dominio, y ninguna era agradable. Es difícil estimar los daños que este evento ocasionó porque, como siempre, tras su finalización todo volvió a su lugar, junto con la sensación de “acá no pasó nada”. Pero es ineludible el hecho de que, durante este tiempo de completa oscuridad, que no fue necesariamente corto, la ciudad fue pura tinieblas y le perteneció única y exclusivamente a la peor escoria de Gotham. El único precedente de algo así es quizás “No Man's Land”, evento anterior a la continuidad actual.
1 - “ZERO YEAR”.
Y aquí estamos. Fue un largo camino, desde un brote de Man-Bats hasta una alucinación colectiva, desde la noche en que los Búhos salieron de las tinieblas hasta el día en el que el Joker perdió la paciencia, hemos visto a la pobre Gotham asediada por amenazas de todo tipo. Sin embargo, aún falta la tragedia primigenia, aquella hecatombe que dio inicio a todo en más de un sentido y que fue tan potente y funesta, que el tiempo impuso que dicho suceso sea recordado como “El Año Cero”, el año en el que Gotham tuvo que caer para volver a surgir. Es como si cada villano necesitara al menos una oportunidad para desquitarse con la ciudad. Scarecrow casi ve sus sueños cumplidos en “Gothtopia”, el Príncipe Payaso desfiló con un carnaval de locura y destrucción por las calles, y en “Forever Evil” cada villano tuvo su pequeña porción de Gótica para usar de punching bag pero, y cuesta creerlo, el codiciado puesto de principal destructor, causante de la mayor tragedia de Gotham dentro de la nueva continuidad se lo lleva Edward Nigma, a.k.a. The Riddler.
Bruce apenas comenzaba a forjar la leyenda de Batman cuando el enemigo más letal hasta entonces mostró la cara: la ignorancia, y su verdugo era Riddler. Bajo la premisa de “evoluciona o muere”, un desquiciado Nigma desafió a los ciudadanos de Gotham a alcanzar un nuevo estado intelectual que le permitiera resolver sus acertijos, y así dejar atrás la mediocridad e ignorancias que, según él, estaban destruyendo la ciudad. Ante el inminente fracaso por parte de los civiles y la consecuente victoria de Riddler, éste castigó a Gotham con una nueva época oscura al dejarla sin electricidad. Más tarde, ante un segundo fracaso, vino lo peor. Edward inundó las calles con aguas contaminadas con una sustancia de crecimiento vegetal acelerado, propiedad de la doctora Isley (Ivy). La ciudad entera quedó bañada en un tinte verde compuesto principalmente de maleza y trepadoras. Gotham retornó a la prehistoria y se volvió salvaje. Debido al bloqueo de los puentes y accesos, la ciudad perdió casi toda comunicación con el exterior, y la entrada y salida a la misma era prácticamente imposible, además de las múltiples amenazas globales en caso de que alguien intentara escapar. Según Alfred, al menos un nueve por ciento de la ciudad se perdió por completo, con daños irreparables tras la inundación. Tan solo un mes después de la catástrofe, y con la ayuda de Wayne Enterprises, Gotham volvió a brillar con un resplandor nuevo, ya que su remodelación tuvo que iniciarse casi de cero. De las cenizas resurgió una nueva ciudad, pero para ello primero tuvo que haber fuego, y eso fue “Zero Year”, la más grande tragedia que enfrentó Gotham en esta continuidad.
¡Eso es todo, amigas y amigos! Luego de “Zero Year” no es de extrañar que los habitantes de Gotham se tomen a la ligera los demás sucesos. Me gustaría leer sus opiniones y sugerencias arriba, en la caja de comentarios, o en Facebook. ¿Qué les pareció el Top? ¿Están de acuerdo con el orden? ¿Hay algún evento el cual haya omitido? Siéntanse libres de comentarlo. ¡Hasta la próxima!
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