Reseña: “Batman '66 meets Wonder Woman '77” #5 - #6

Aaarrrrooo!

Título: “Batman '66 meets Wonder Woman '77” #5 y #6.
Escritores: Marc Andreyko y Jeff Parker.
Lápices: David Hahn.
Tintas: Karl Kesel.
Colorista: Madpencil.
Rotulador: Wes Abbott.
Portada: Michael y Laura Allred.

¡Santas ocurrencias!
Siguiendo la misma lógica devastadora que la serie televisiva exhibía al desentrañar los intrincados enigmas del Acertijo, Batman descubre cuál es el plan de Ra’s al Ghul y su siniestra —pero sexy— hija: ¡La Isla Paraíso y su oculto Pozo de Lázaro!
¡Al Bati-Avión, Joven Maravilla!
En una carrera contra el tiempo, el Dúo Dinámico se eleva en los aires —vaya a saber qué mentira le estará contando Alfred a la tía Harriet para justificar una nueva ausencia de Bruno Díaz y su “protegido”. Fueron al sauna, madame…—.
Como cualquier avezado lector de cómics sabe —y si no saben, se los cuento ahora—, ningún hombre puede pisar la isla hogar de las Amazonas… Claro, no es que esta versión de Batman y Robin sean muy hombrecitos que digamos, pero tienen sus cositas colgando que atestiguan su género.


¡Qué hacer!
Pues llevarse a Gatúbela, en versión Julie Newmar —que era la más hot… ¿Qué? ¡Yo tenía siete u ocho años cuando veía la serie y ella para mí era muuuuy hot!—, para que haga las veces de embajadora.
Sí, sí, harto descabellado el plan, pero es Adam West… ¿qué esperaban? ¿A Batsy y su “querido” travestidos?... Aunque, pensándolo mejor…
El asunto es que —y, por favor, corten las interrupciones— los tres llegan a la isla escoltados por WoWo en su jet invisible, el mismo que veíamos… digo, NO veíamos en los Súper Amigos
A ver, el niño del fondo… ¿Qué quiere preguntar? ¿Qué por qué Marvila usa avión si puede volar?... ¿Es que usted no está al tanto de las distintas continuidades en el Universo DC? En esa época, WoWo no volaba… sólo lo hacía cuando fumaba algunas cosillas…
Como era de esperarse, son recibidos con honores, lo que demuestra que eso de que los hombres están prohibidos en la Isla Paraíso es un mero gancho turístico porque, si no pierdo la cuenta, hombre que ha llegado a la isla, ha recibido los favores de las dueñas de casa —empezando por el Trevor ése—. Seguramente tanto comer marisco todos los días debe hastiar… y un poco de carne de vez en cuando se agradece… If you know what I mean…


Pero una fiesta en que están un par de superhéroes nunca acaba bien, así que ni siquiera pasan de la sopa cuando las alarmas se encienden. ¡Alguien más ha encontrado la Isla y ha entrado usando la violencia!
Como es de suponer, es el vejestorio Ghul y su hija que han llegado junto a sus soldados para alcanzar el Pozo de LázaroLazaru's pit, para los que se creen gringos y no se dan cuenta que Trump los devolvería a Sudacaland de una patada en el ass si asomaran la nariz por allá—.
¡Hora de entrar en acción!
Y como estamos entre Amazonas, que mejor que un laberinto de escenario, con Cíclope y Grifo incluido… aunque los grifos no sean precisamente parte de la mitología helena… Pero, buee… Es lo que hay.
Como es de esperar, aún cuando superan todos los obstáculos, Ra's al Ghul consigue sumergirse y emerger completamente rejuvenecido… O sea, más o menos joven… Digamos que en sus cuarenta o cincuenta.


¿Qué pasará ahora?
¿Podrán el Dúo Dinámico, Marvila y Gatúbela detener al Cabeza de Demonio?
¿Qué Green Lantern aparecerá en la película de Justice League?
En una serie concebida para divertirse, la premisa se cumple con creces. No se cansa uno de leerla y encontrarle el chiste.
En una de sus mejores movidas, DC reunió a dos íconos de la televisión de nuestra niñez y ha creado un producto adictivo. Y nosotros en el Blog de Batman, celebramos ello.
Los esperamos a la vuelta de dos números más para seguir desentrañando los misterios del encuentro del Siglo… bueno, del Siglo XX…

Ah, cómo pasan los años…

Comentarios

Joel Gastelu ha dicho que…
Genial reseña! Tan divertida como -supongo- el comic en si. Felicidades por la alegria que transmite tu articulo 😊
mena ha dicho que…
¡Gracias, Joel!
Entre tanta reseña seria que nos toca escribir, siempre es grato hablar de un título que es sólo entretención pura.