All it will take… is a little blood
Título: “Nightwing Must Die!”, parte cuatro.
Escritor: Tim Seeley.
Artista: Javier Fernández y Minkyu Jung.
Colorista: Chris Sotomayor.
Rotulador: Carlos M. Mangual.
Portada: Fernández y Sotomayor.
Portada variante: Ivan Reis, Oclair Albert y Sula
Moon.
“La mejor sangre es, en primer lugar, la menstrual
regida por la luna. Luego le sigue la
sangre nueva de un niño, es decir la que cae de la hueste celestial”.
(“Liber Legis”, capítulo 3, verso 24, Aleister Crowley)
¡Sí!
Lo que todos esperábamos se ha confirmado en este nuevo y pródigo número de Naigüín.
Simon Hurt es… Simon Hurt.
Sí, sí, ya sé que
suena a guión de telenovela, pero créanme que éramos muchos los que nos
preguntábamos si este Dr. Hurt era realmente él, o uno de los tantos dollotrones de Pyg.
Es un alivio que
desde las primeras páginas, con su escenografía sacrificial, nos conteste esa
duda.
Directamente
sacado del run de Morrison, pasando por la escuela del Maestro Crowley, he aquí al hombre…
Y si a ello
sumamos que no nos la jugaron chueco y Hurt
es realmente el malo maloso y no
alguien manipulado por otro malo en las sombras, sólo podemos exclamar: ¡sí!
![]() |
Grayson y Tsang serán papás. Esperemos que se hayan casado para mantener la moralidad de los niños que leen estas cosas. |
Vámonos a la chuchoca de una:
Tras recuperar a Shawn de las manos del perverso Professor Pyg, Nightwing debe
emprender una nueva búsqueda, esta vez para rescatar a Damian, quien, con la ayuda de Deathwing,
ha sido secuestrado por el Doctor Simon
Hurt, la mente maestra tras este
plan de venganza contra el culo más posteado de Internet.
Como hemos visto
en capítulos anteriores, seguir la pista resulta bastante fácil porque siempre
hay alguien, un sobreviviente, que les dice a dónde se han llevado al plagiado.
Y esta vez, las
pistas conducen al Sahara mismo, ese místico sitio que respira ciudades
perdidas. Donde un bárbaro de las tierras de Cimmeria al norte vagó al son de su mandoble, decapitando lo mismo
a monstruos, magos, reyes, ladrones y mujeres malditas, con la mirada fría y
celeste siempre alerta, y el grueso puño presto. Asaltando ciudadelas como Estigia, Luxur, Keshatta la plagada de brujería, Shem y otras. Amigo del buen y mal vino, amante de mujerzuelas y
princesas. Buscando un reino sobre cuyo trono sentarse y que, tras largas
fatigas encontró en Aquilonia misma,
a muchas millas de su tierra natal.
Si no saben de
quién estoy hablando, es que de cómics y literatura pulp saben menos que lo que el editor del Blog de Batman sabe de mujeres. ¡Ya! Váyanse a Wikipedia por lo menos y después vuelven por estos lares. ¡Y que Bêlit les corte el colgajo y lo arroje
a las corrientes de la Costa Negra!
![]() |
Estos dos se tienen ganas... Seee... |
Volvamos a lo nuestro: al más puro estilo Indiana Jones, Naigüín y Tsang se internan en las arenas saharianas para ser emboscados… ¡y resultar ellos los emboscadores!
Pelea aquí,
saltimbanqui acullá, pronto dominan la escena y ¡por enésima vez! un sobreviviente
les da las señas. ¿Ven ese obelisco derruido? De ahí, tomen a la derecha, hasta
la columna carcomida, luego tomen por la izquierda, donde hay un esqueleto de
camélido, de ahí…
Pronto vemos a Grayson y señora —bueno, si están esperando
un hijo es que deben estar casados, supongo yo. No me vengan con esas inmoralidades
de países nórdicos— descendiendo a alguna catacumba, listos para ser atacados
nuevamente por Deathwing, quien aún
porta esa misteriosa daga capaz de rasgar el velo de la realidad —al estilo de
la trilogía de La Materia Oscura de Pullman—. Un estilete que, al decir del
Dollotron, viene desde el otro extremo del universo —música de The Twilight Zone, plizz—. Lo que, por supuesto, en los tiempos de “Rebirth” que corren en DC puede significar muchas cosas… o
nada…
Pero Deathwing es apenas el aperitivo para
el plato principal: Simon Hurt, un especialista en darle mucho
significado a su apellido.
![]() |
Ni la casa de mi suegra es tan terrorífica... Cariño, no leas esta reseña, plizz. |
Tras derrotar al doppelgänger, Nightwing avanza hasta la siguiente sala donde el gran enemigo se presta a sacrificar a Damian para obtener otra ración de inmortalidad.
¿Qué pasará
ahora?
Todo queda en
suspenso porque las estocadas de la mentada daga hacen su efecto y Grayson cae de bruces a, lo que
suponemos, un nuevo viaje astral.
Con un nuevo
episodio de “Nightwing Must Die!” perfectamente
redondo y lleno de detalles necesarios —y sobrevivientes que te dan la
dirección—, Seely y Fernández —apoyado a ratos por Jung… el dibujante, no el psicoanalista—
siguen contándonos un magnífico arco de Ala
Nocturna que, hasta el momento, no tiene puntos flacos.
![]() |
A Crowley, padre de la iglesia satánica moderna, le gusta esto... |
Sinceramente, el retorno de Simon Hurt no pudo estar en mejores manos.
Lo que nos espera
ahora es la resolución de esta historia y, por los avances ya vistos, hasta al
mismísimo Aleister Crowley deben caérsele los calzones por
la emoción.
¡Nos vemos en la
próxima!
Comentarios
El ultimo episodio si le sumas a Dick, Damian y Hurt estará genial.
Batisaludos!