Reseña: “Detective Comics” #985-#987 (“On the Outside”, partes 3 a 5)

I am an outsider

Título: “On the Outside”, partes 3 a 5
Escritor: Bryan Hill
Artista: Philippe Briones [#985, #986]
Lápices: Miguel Mendonça [#987]
Tintas: Diana Egea [#987]
Colores: Adriano Lucas
Rotulado: Sal Cipriano
Portadas: Eddy Barrows, Eber Ferreira y Lucas [#985, #987]; Eduardo Pansica, Ferreira y Lucas [#986]
Portadas variante: Mark Brooks

“I know always that I am an outsider; a stranger in this century and among those who are still men.”
[The Outsider, H.P. Lovecraft]

Uff… Y se nos acabó esta laaaarga introducción al nuevo título que DC Comics prepara con los Outsiders como protagonistas.
Sip. Aunque fue entretenido y repetitivo a partes iguales, la función de este arco no es otro que servir de prólogo (así como lo fue No Justice” en su momento). Una suerte de cómic instrumental.
Pero lo que ha de venir, ya vendrá. Aboquémonos a lo que tenemos entre manos: el arco “On the Outside”.

Lo dijimos: este arco es la antesala de "Batman and The Outsiders".

Porque sus méritos —y deméritos— tiene.
Nadie puede negar que ha sido un viaje entretenido. Con muchas cosas súper heroicas que nos gusta ver en los cómics.
Y tuvo su parte dark o depre con nuestro buen Batman cuestionándose al atardecer mirando por un ventanal.
Pero lo que sí destacó —y se agradece— es su nivel de violencia gráfica como pocas veces tenemos oportunidad de ver.
Sí, sí. Nuestro Murciélago se va a trompadas página por medio de modo habitual; sin embargo, escenas como la del chofer escolar con sus sesos volando, o a la lectora de noticias ardiendo frente a las cámaras, son situaciones que rara vez podemos apreciar en los cómics mainstream —es decir, los títulos regulares que tiene como público objetivo a adolescentes llenos de granos—.
Y la violencia desatada por Karma, el villano de turno, se mueve en ese nivel. ¡No podemos pasar por alto esto!: En un arco que parece déja vu de tantos otros vistos —casi como un spin-off de The Victim Syndicate (“Detective Comics” #943-#947)—, esas escenas hacen que valga la pena haber leído los cinco números que conformaron “On the Outside”.

Maravillosa escena que sorprende por su audacia gráfica.

Ya que hablamos de Karma, detengámonos en este nuevo capítulo de enemigos creados por el mismo Batman.
Como nos enteramos, la verdadera identidad de Karma es Fleet Delmar, un asesino que recibió su dosis de castigo en la forma de una variación del Gas del Miedo de Scarecrow.
Dispuesto a vengarse, adquiere un yelmo de manos de una contrabandista con el pueril nombre de Martina Dementieva —algo así como Cruella de Vil o Maléfica—. Casco que le permite leer el pensamiento a las personas, le da agilidad y súper fuerza y que parece tener un origen extraterrestre ligado a Brainiac —¿recuerdan que mencionamos No Justice”? Parece que hay una relación sutil ahí…—.
Pero su integridad misma está tan ligada al yelmo, que basta una triquiñuela de Batman para incapacitarlo y arrancárselo para vencerlo.
Claro, la triquiñuela es abrir la mente del Murciélago para que Karma reciba terapia de shock con todos los traumas que Wayne arrastra desde el Crime Alley.

Yo no quisiera estar en la cabeza de Batman...

¿Ven? Hasta la mente atormentada de Batman es un arma dado el caso —y creían que Scott Snyder con John Romita, Jr. se habían sobrepasado hasta el ridículo con las armas que sacó de bajo la manga en All-Star Batman”. Brrrrr… un escalofrío recorre mi columna de sólo recordarlo—.
No obstante, aun con las supuestas novedades en este villano markoviano, Karma no deja de ser un refrito de muchos otros que hemos visto antes, siendo la pandilla del Crime Syndicate el más reciente y notorio. Y sus acciones, no muy distintas de las llevadas a cabo por otros adalides de la maldad —ya mencionábamos en nuestra reseña anterior las similitudes de este arco con Death of the Family (“Batman” v2 #13-#17)—.
Mención aparte merece Black Lightning, que juega un papel de nexo con el próximo título de los Outsiders.

Black Lightning acostumbrándose al trabajo en equipo

Si bien se agradece cómo es introducido y el uso final que Hill hace de él para el clímax del arco, no podemos evitar sentir que sus interacciones con Batgirl —extrañamente infantilizada en este arco—, Orphan y The Signal —que bien hubieran podido aprovechar la ya mentada violencia del arco para habérselo cargado y hacernos un favor a quienes no soportamos al Robin mutante de Snyder…— tengan más de relleno que de necesarias para el avance de la trama en sí. Aunque, claro, ellos son la base de los futuros Outsiders, so…
Para qué hablar de Katana: una aparición tan instrumental como el arco que reseñamos aquí. Si no está, ni se nota. Pero, repetimos, como ella también será parte de los Outsiders, so…
¿Qué viene ahora?
Dentro de “Detective Comics”, poco que tenga que ver con ellos. Esta historia continúa en “Batman and The Outsiders”, título anunciado para Diciembre por el editor de DC Chris Conroy hace un par de semanas, siempre bajo la pluma de Hill y con el arte de Dexter Soy —directo desde Red Hood and The Outlaws—.

Portada de "Batman and The Outsiders" #1, dibujada por Tyler Kirkham y Arif Prianto.

Colgándose de dos puntos esbozados en este arco —que tan magro no fue, después de todo—: los llamados Brainiac Files (¿recuerdan lo del yelmo?) y Markovia… ¡Sí! Desde su mismo origen, la historia de los Outsiders ha estado ligada y dictada por esta nación ficticia de Europa del Este. MARKOVIA.
Si hasta en los adelantos de la esperadísima Young Justice: Outsiders” vemos a Markovia metida a fondo en la historia.
Y podemos estar seguros de que este nuevo grupo de Outsiders ya está sacando boletos para ese país y, quizá, su primer enemigo sea bastante sobrenatural: la tal Dementieva cierra el #987 haciendo alusión a un viejo enemigo… Roderick… o Príncipe Roderick. Un vampiro que ya alguna vez intentó hacerse con el trono de Markovia y que, aparentemente, murió tras su encuentro con los Outsiders… los de ese tiempo, se entiende (Outsiders v2 #1 al #11, años 1993-1994).

Ése, con la copa de vino tinto (?), ése es Roderick...

Lo que queda por verse es cómo diablos encajarán todo el tema de los Outsiders, de Markovia… y de Doomsday Clock, que en su línea temporal futura ha hecho referencia a ellos de manera bastante directa. ¡Vaya dolor de cabeza para Brion Markov, el eterno príncipe heredero de la dichosa nación propensa a los dictadores!
Entretanto, “Detective Comics” continúa y ya el próximo número nos adelanta un Batman que, calzones por fuera mediante, nos va a devolver la esencia del personaje: el detective siguiendo pistas. The World's Greatest Detective… ¿lo recuerdan? Título tan caduco hoy por hoy como lo de El Último Hijo de Krypton
Sólo esperemos que este reseñador no se demore tanto en revisar junto a ustedes lo que viene…

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