Reseña: "Batman: Hush" (DCAU)


Título: Batman: Hush
Año: 2019
Duración: 81 min.
Director: Justin Copeland
Guión: Ernie Altbacker, Jim Lee, Jeph Loeb
Música: Frederik Wiedmann
Productora: Warner Bros. Animation
Distribuidora: Warner Bros. Home Entertainment

Antes que cualquier otra cosa suceda, es más que obvio que esta reseña/resumen/crítica/pliego petitorio, por más que intentemos no hacerlo, contendrá SPOILERS...

Pero, vamos, al final de todo quienes ya tengan un tiempo en este mundillo de los cómics han de saber de qué trata. Y quienes no han tenido la oportunidad de leer la historia original, les recomendamos enconadamente hacerlo, no porque sea necesario tener referencias para ver esta animación sino porque se trata de una saga que se convirtió en una lectura obligatoria para cualquier fan del Caballero Oscuro.

Con el aviso más que claro, comenzamos entonces...

El nuevo DC Animated Universe
Es bien sabido que si algo sabe hacer bien DC y Warner juntos son animaciones. No en vano "Batman: The Animated Series" es y sigue siendo un parámetro para muchos. Con esto en mente, y dejando un poco la controversia que el propio Jason Fabok generó al quejarse del estilo de animación del mundillo animado de DC Comics, hay que comentar algo de entrada: esto no es una adaptación completa de "Batman: Hush".

Si bien la trama toma una gran inspiración y libertades de la historia original hecha entre el 2002 y el 2003, tiene que acotarse a una realidad que el mismo estudio ha generado desde el lanzamiento de "Justice League: War".

Teniendo esto en cuenta entendemos que la película queda situado tras los hechos de "Batman: Blood", "The Death of Superman" y "Reign of Supermen". De hecho en los minutos iniciales la primera inconsistencia que vemos es la aparición de Batgirl (específicamente, la Batgirl de Burnside), que ni siquiera fue introducida como aliada de la Bati-Familia.

Esto explica varias cosas: siendo este arco uno de las más ambiciosos de la era previa al "Flashpoint", una gran cantidad de personajes desfilan en las páginas ilustradas por Jim Lee, sin embargo al no haber sido propiamente presentados en este nuevo DCAU, algunas cosas debieron ser alteradas.

En la parte inicial de la película nos muestra cómo el billonario Bruce Wayne sufre de ser Bruce y, justo cuando está quejándose de ello, se encuentra nuevamente con Selina Kyle en una fiesta de gala (para variar). No bien apenas Bat y Cat comienzan el cortejo de siempre, Thomas Elliot hace su aparición. Bruce recuerda a Thomas como una de las personas que lo ayudaron después del asesinato de sus padres, uno de los mejores amigos de su lejana infancia.

Un momento que podría ser una buena narrativa romántica entre los dos fans del látex [sólo para aclarar en este Universo, así como en la historia original, Selina desconoce la identidad secreta de Bat... pero ya hablaremos de esto unos párrafos más abajo], es cortado de manera abrupta por la notificación del rescate de un niño a manos de Bane [aunque en la historia original se trataba de Killer Croc]. Ante la sorpresa de Elliot, la pareja desaparece en un par de segundos.

Al parecer Catwoman lleva más de un año sin cometer ninguna fechoría, por lo que el mismo Batman comienza a dudar de ella como una villana y a considerarla como... algo más.

En medio de la trifulca con Bane y el rescate del niño por parte del GCPD, Catwoman toma el dinero que estaban por entregarle al mandamás de Santa Prisca para liberar a su rehén. Obviamente Bane no lo toma de la mejor manera pero no puede hacer mucho ya que cae derrotado a manos de Batman, cosa que en parte podríamos atribuirlo al control mental de Poison Ivy pues incluso el propio Alfred da a entender que esta versión de Bane suele ser más que una simple montaña de músculos.

Aquí, para sorpresa de todos, aparece Lady Shiva, quien alerta a Batman que alguien traspasó la seguridad de la Liga de las Sombras y logró llegar hasta un Pozo Lázaro, y el Encapotado curiosamente muestra dispuesto a averiguar qué o quién está detrás de eso.

El GCPD llega para llevarse a Bane y para que la historia no pierda sentido, el maletín del rescate desapareció. ¡Se trata de Catwoman! Comienza entonces la persecución clásica que por casi 80 años Bat y Cat han protagonizado. Esto llevará al Mejor Detective del Mundo a caer desde lo alto de un edificio ante la mirada atónita de la propia Cat, quien no puede hacer mucho por ayudarlo (cualquier parecido con la cortina de humo que King nos vendió es mera coincidencia).

Ya a nivel de calle unos rufianes intentan quitarle la máscara a Bats, recibiendo una descarga eléctrica en el proceso. Tomándolo como una provocación, los malhechores se enfurecen e intentan acabar con la vida del maltrecho Encapotado. En eso llega Catwoman al rescate de su querido sólo para verse juzgada y atacada también por Batgirl, quien hace acto de aparición para socorrer al Murciélago.

Aquí es donde ya comenzamos a notar que este filme tiene una buena dosis de fan-service ya que Selina deja la escena para llevarle el dinero del rescate a Ivy, dejándonos ver que también estaba bajo su control con una escena metida con calzador (que su imaginación vuele).


Mientras tanto en la Batcave, Batgirl, Nightwing y Pennyworth
planean cómo explicar este accidente para que Bruce pueda ser atendido por un médico, específicamente por Thomas Elliot.

A partir de este punto, la historia da una vuelta bastante interesante ya que no sólo toma elementos de manera libre del cómic sino que aporta un poco de la trama que, al final de todo, suponemos, es la intención del filme: plantear la relación que existe entre Bat y Cat.

Luego de un período de recuperación, Bruce decide que es momento de investigar los motivos de Bane y va a buscarlo en la prisión, lugar donde Amanda "The Wall" Waller esta intentando transferirlo para poder "usarlo" en sus planes, muy a pesar de lo que Gordon piense. Bats, conociendo a Waller, sabe que cuestionarla por su Suicide Squad la hará cambiar de opinión y acceda a darle 5 minutos con él. ¿Qué quiere? Información.

No obstante Bane escapa y va tras Catwoman, que justo estaba en el invernadero donde se encontró con Ivy previamente. Al parecer el efecto del "control" de la Dra. Isley ha pasado y Selina está buscando respuestas. En ese momento Bane la encuentra pero, para fortuna de La Gata, Batman aparece para salvarla y "hacerle entrega" de Bane a Waller. Sin información alguna. La escena que Jim Lee hiciera famosa en su momento es mucho mejor que lo que nos regalan en la animación, pero se agradece el intento.

Cuestión que la pareja comienza la búsqueda de información yendo tras las pistas de Isley y esto los lleva a Metrópolis. El objetivo de Bruce no es precisamente fastidiar a Clark Kent con su visita, bueno, al menos no dentro de su top 3 de prioridades. Su verdadero objetivo es buscar a Lex Luthor, quien al parecer es de los pocos que abastece las sustancias que Ivy ha estado usando para sus experimentos con plantas.

Después de una pequeña discusión, Luthor le brinda la información necesaria: el destino de los embarques que fueron recientemente comprados. Ahí es donde encontrará a Ivy antes de que el problema siga creciendo. Recordemos ahora que en la actual continuidad de este universo Lex es miembro honorario de la Liga de la Justicia y esto también da pie a que una variedad de historias que podrían ser creadas en la animación ("Darkseid War", anyone?) pues a esta altura es obvio que están creando un Universo Compartido distinto al de los cómics, los filmes live-action y las series.

Divagues aparte, Ivy se encuentra a la espera de Catwoman en un invernadero en Metropolis. La Mujer Gato llega y finge estar bajo los encantos de Pamela para poder atacarla y, justo cuando Selina está a punto de ser asfixiada por una de las plantas de Ivy, Batman aparece para volver a salvarla, sólo para encontrarse con otro de los tantos "controlados" por la villana: Superman.


Quiénes hayan leído el cómic o simplemente gocen de una buena pelea entre Bats y Supes, esta secuencia les va a ser suficientemente grata. No será el mejor enfrentamiento que podamos ver en una pantalla pero si vemos que ambos dan rienda suelta a sus deseos de golpearse mutuamente y eso de por sí ya entretiene bastante.

La expresión "en el fondo (Superman) es una buena persona y en el fondo yo no (Batman)" no termina de convencer, principalmente porque los diseños de la animación (a cargo de Phil Bourassa) no son tan impactantes como los de Jim Lee, y porque tampoco contamos con un trasfondo narrativo lo suficientemente rico como para sustentar dicha afirmación. Aún así esto no quita que la sensación de ver a Los Mejores del Mundo agarrándose a las trompadas te haga gritar como groupie.

Sabemos que El Caballero Nocturno siempre va un paso adelante y se evidencia cuando logra que Catwoman secuestre a Lois Lane para
que el Boy Scout deje el control mental provocado por Ivy.  Luego de las correspondientes explicaciones (más bien de cortesía), ambos héroes buscan a La Hiedra Venenosa para capturarla.

Ivy revela quién está atrás de este plan tan elaborado: el misterioso
Hush. Acto seguido, Clark pide que la Bati-Pareja deje la ciudad ahora que obtuvieron lo que querían. Mientras, el villano vendado los observa desde lejos.

Lo que sigue es una de las secuencias más sui generis que podríamos y podremos ver en el futuro inmediato del universo animado: Bruce
preparándose para una cita con Selina, con ayuda de Grayson, Alfred y hasta con sermón incluido de Damian hablando acerca de los gustos tan "peculiares" de su padre y dándole de paso unos cuantos tips de seguridad (al parecer de este humilde intento de escritor, la mejor parte de toda la película).

Entre tanto, Hush secuestra al mismísimo Joker y convence a Harley Quinn de iniciar un ataque durante la cita de la pareja en la opera. Sabemos que no estamos acostumbrados a ver a un Bruce Wayne sentimental y a un Batman, literalmente, "flotando" con alguien que lo entiende casi casi a la perfección. Sin embargo, esa es una de las formulas por las que ésta pareja está a la par de otras grandes de la industria del cómic.

Ya en la cita doble con Elliot (porque el billonario filántropo favorito de todos también quiere reforzar su relación con el amigo que por años ha mantenido alejado), Harley aparece para desatar el caos y buscar a Wayne. En lo que éste intenta controlar la situación, nuestro héroe también procura alejar a Selina, Tommy y su invitada de la acción.

Esto no detiene a Cat, quien de inmediato se aparece para darle su merecido a Harley Quinn mientras Bruce se prepara para usar el manto, justo a tiempo para evitar que Selina sea gravemente herida. Mientras Harley escapa de la escena del crimen, la lluvia comienza a caer y un disparo a la distancia se alcanza a escuchar.

Batman sale del recinto sólo para ver el cuerpo de Tommy en el piso. El Joker le disparó a quemarropa y esto despierta algo dentro del Encapotado que sólo puede canalizar dándole una golpiza al Payaso Rey del Crimen. Únicamente la aparición de Jim Gordon evita que Batman comenta una locura y cruce la línea que siempre se ha jurado evitar. Nadie negará que una secuencia de ese estilo siempre es grata aunque, nuevamente, hacía falta un poco más de trabajo desde la narrativa para reforzar el vínculo entre Elliot y Wayne como para justificar la ira de este último.

Elipsis mediante, Bruce acude al funeral de Thomas Eliot y, aunque Selina aparece para estar a su lado, sabemos que Bats no es alguien que olvide fácilmente.


Aquí es cuando la verdadera parte interesante de la cinta comienza, la que este humilde remedo de escritor cree que fue el verdadero pretexto de la presente animación: mostrar a un héroe no ablandado por los sentimientos sino dispuesto a experimentarlos y mostrarse vulnerable. Bruce está enamorado y tanto Dick como Alfred lo saben a la perfección.

Durante una persecución que involucra al Riddler, Nightwing le dice a su mentor que para dar el siguiente paso en el ship que denomina
Brucelina tiene que aperturarse a todo, es decir revelar toda la verdad, y no solamente se refiere a decirle que es Batman.

Cuando Bats captura a Nygma, a lo lejos identifica la figura de Hush y, acto seguido, lo alcanza simplemente para darse cuenta que este Hush no dudará en usar la información que tiene a su disposición: sabe quién es Batman y, por lo tanto, quienes son sus seres queridos.

Luego de una intensa persecución fallida con el antagonista de turno, Batman encuentra refugio (si le podemos llamar de alguna manera) en el departamento de Selina. Ahí es cuando decide revelarle todo: quién es Batman y porqué de su preocupación constante por ella. Nuevamente, un poco de fan-service que quizá en el cómic no luce mal pero que, por algún motivo, en la animación no deja de sentirse como un tanto extra si se quiere.

Bruce decide llevar a Selina a la mansión para hacerla parte de su vida ante la mirada atónita de Alfred y Dick, quienes sin duda se alegran de ver que por fin el heredero de la fortuna Wayne muestre un poco de humanidad y sentimientos.

El ver cómo se coordinan para pelear e interactuar de una manera tan fluida Bat y Cat es algo que pocas veces hemos visto en la animación y aquí, de nueeevo, es donde podemos darnos cuenta del objetivo de la película: no era tanto presentar a Hush sino mostrar la historia de amor que esta extraña pareja merece. Bastante maléfico.


Batman es alertado sobre la entrada de alguien en la oficina que dejó Elliot, y gracias a esto es que comienza a darse una idea de que es algo más lo que está en juego. Mientras tanto, Selina y Dick salen a patrullar y tienen un momento madre e hijo [aunque nos quedamos con las ganas de ver a Kyle interactuando con Damian como sucedió en la previa del Bati-Casorio, pero bueno]. Ella sabe que Bruce ha estado entrenando a Richard para que eventualmente tome su lugar y así poder tener una vida diferente. Asimismo, ese momento de sinceridad en quienes, además de Pennyworth, son las personas más cercanas a Wayne se ve interrumpido por la alerta de un percance en el cementerio de Gotham.

Ahí, ambos se enfrentan a un Scarecrow, quien logra inyectarle su toxina a Nightwing, por lo que Cat debe hacer juego de su astucia para lidiar con él y evitar que el otrora Robin pase a mejor vida. Gatúbela finalmente logra vencer al tétrico villano e incluso tiene tiempo colocarle un antídoto a Dick para luego enviarlo hacia la Bati-Cueva usando el Batmobile, no obstante, cuando creíamos que la situación estaba bajo control, nuestra protagonista es capturada por Hush. Esto se va a poner bueno...

Batman acude con Gordon a la sala de interrogatorio donde los espera Nygma. Los registros que encontró el Detective en la oficina maltrecha de su fallecido amigo evidencian que Riddler lo había buscado en algún momento. Acá es donde todo comienza a cobrar forma.

Nygma había buscado a Tommy Elliot para que lo ayudara a curarse ya que había presentado una molestia que termino siendo un tumor cerebral. Ante la negativa de ayuda de éste, no porque no pudiera sino porque ya no tenía salvación cercana, Nygma decidió buscar la única opción que le quedaba: el poder regenerativo de un Pozo Lázaro. Al adentrarse en el Pozo por fin puede responder el acertijo que lo mantiene incómodo: ¿quién es Batman?

Pero lo más importante es la revelación de que Riddler en realidad es Hush (evitémonos gritos de desesperación, al menos hasta finalizar estas líneas). Él fue quien planeó el contacto con Bane, Ivy, Harley, Joker y ahora con Clayface, quien se revela como el Nygma que fue capturado por Batman en aquella persecución en las calles de Ciudad Gótica.

El Orejas Puntiagudas entonces se entera que Catwoman está a merced del verdadero Edward Nygma. La pelea final nos muestra a un Riddler que está perdiendo los efectos secundarios del Pozo (es decir fuerza e inteligencia) pero que aún así puede darle batalla al Murciélago. Entre explosiones, fuego y puentes derrumbándose, Bat y Cat logran salir avantes, el primero del sangriento enfrentamiento con el villano de los acertijos y la otra de una probable muerte a manos de maquinaria pesada.

No cabe duda que ver a la pareja dar rienda suelta de sus habilidades conjungas es algo fantástico que los fans deseamos ver por mucho tiempo. En el momento de la verdad, el Acertijo está a punto de caer al fuego a una muerte segura pero Batman lo salva. Catwoman busca disuadirlo para que lo deje caer y salvarse ellos, mas el Encapotado reniega de eso. Hush sabe que no lo dejará morir pero eso no implica nada para Catwoman. Qué sucede puntualmente en los últimos minutos del largometraje es algo que preferimos omitir para que lo vivan por cuenta propia.


¿Qué nos deja el final? 
Algo que puede ser bastante útil, de nuevo a criterio de este humilde escribano, a la hora de ver ya sea una animación (serie o película) o un producto live-action (serie o película) es siempre comenzar con la mentalidad de "es un capítulo autoconclusivo", incluso si se trata de una producción enmarcada dentro de una franquicia. Este método, si se quiere, me ha librado de múltiples dolores de cabeza, en especial cuando se trata de todo lo que DC/Warner ha hecho en los últimos años.

Eso, de alguna manera, se volvió un ejercicio de resistencia porque, cuando la crítica comienza a hacer lo que menos sabe (criticar, vamos), al menos yo me quedo con la tranquilidad de que nada de lo que vea publicado me puede afectar del todo hasta que yo comience a emitir mi juicio.

"Batman: Hush" es, como en algunas líneas arriba les comentaba, un pretexto. Que pueda caer de las expectativas de algunos por haber fallado al hype de lo que este clásico moderno representa es un punto y aparte. Pero no es un mal intento, en lo absoluto. Es algo bastante rescatable y termina por ser una buena mezcla de humor (uno sobrio, sano, bien intencionado, no como ese con el que el Ratón ha querido intoxicarnos por años), acción y romance.

Pero no es un intento cualquiera sino uno que trata de mostrarnos ese lado sentimental de nuestro héroe, el mismo que ha emitido ventas favorables para el run tanto de Snyder como de King (principalmente de éste último y su Bat-Wedding).

Convertir al Riddler en Hush y que éste haya descubierto la identidad del héroe de Gótica gracias a los efectos secundarios del Pozo Lázaro no es algo que pueda dejar conformes a muchos, pero si es algo que narrativamente es necesario. No justificado (del todo), si necesario.

Todas las cintas animadas de DC tienen una duración aproximada de 75 minutos, más sus créditos. Es prácticamente imposible embutir una saga de al menos 300 páginas en su título central, más una buena cantidad de tie-ins, explicaciones y demás pretextos por vender más en esta franja de tiempo, por lo que es entendible que hayan quitado o simplificado cosas en pos de aprovechar cada minuto al máximo, asimismo en ocasiones se nota la necesidad de reforzar ciertos plot points o la prisa con la que se desarrolla el guión.


Por otro lado vale la pena recordar que este arco originalmente también lidiaba con el regreso de Jason Todd previo a convertirse en Red Hood, cosa que no tuvo lugar en la película por razones obvias pese a que tanto Todd como Tim Drake existen en este universo. El tema es que no solamente no fueron introducidos aún sino que, según declaraciones de los productores del DCAU, en esta continuidad nunca portaron el manto de Robin, de modo tal que habrá que ver con qué excusa los presentan en el eventual caso de que una historia requiera su presencia.

La animación no es para nada mala aunque puede aburrir de a ratos con los diseños, que suponemos es a lo que Fabok se refería. De todas formas, al margen de lo que cada uno pueda opinar sobre los diseños de Bourassa o la calidad de la animación, lo cierto es que ya nos venimos acostumbrando a este estilo desde el relanzamiento de las animaciones como parte prioritaria para DC.

El final del cómic dista del final de la cinta por varios detalles. Como dije, no ahondaré en ellos para darles oportunidad de que emitan su propio juicio, sin embargo se siente mucho más orgánico en algunos aspectos. Dicho esto es imposible dejar de lado, o al menos imaginar, las implicaciones que el adentrarse en la relación de Bruce y Selina puede traer a futuro para el universo animado.

Si bien ya anunciaron que se nos esperan grandes producciones y que posiblemente la próxima animación batmaníaca sea un corto que adapte los hechos de "A Death in the Family" como parte del revival de DC Showcase en 2020, el haber dejado asentada la química, la toxicidad, la naturaleza y la necesidad de Bat y Cat nos hacen pedir más. Después de todo si ya vimos un intento de Court of Owls, ¿quién dice que en un futuro no podamos aventurarnos a tener una Bati-Boda?

Lo que nos deja esta cinta es una grata impresión de que Batman puede y quiere más no sólo para sí mismo sino para él y los suyos. Justo lo que King nos hizo creer.

En fin, amable lector que se ha quedado conmigo hasta el final para ver si llego a algún punto, "Batman: Hush" es una buena animación que se añade a este maravillo universo propio que está creando DC. Y debemos estar agradecidos por ello.

Comentarios

Anónimo ha dicho que…
Tanto en estas películas, como en los cómics, realmente me molestan como están dejando d lado a Tim Drake.